La temporada de alto riesgo de incendio forestal comienza este martes, 1 de mayo, en Balears, por lo que no se puede hacer fuego hasta el 15 de octubre en ningún terreno forestal ni a menos de 500 metros de estos, a excepción de quien disponga de una autorización administrativa especial para cada actividad que pueda generar peligro de incendios.
Según han recordado desde el Govern, la concienciación y responsabilidad ciudadana es vital, ya que "alrededor del 90 por ciento de los incendios se originan por causas antrópicas, ya sea tanto por negligencias o accidentes como por causas intencionadas".
Por esto, insisten en que se debe tener un especial cuidado durante estos meses con las colillas de cigarrillos, el uso de maquinaria, las quemas de restos vegetales y el uso de material pirotécnico.
En 2018 en Balears ha habido 18 siniestros que han quemado 2,3 hectáreas. En el año 2017 hubo 93, con 167 hectáreas afectadas. El más importante de estos fue el de Sílles (Pollença), en el que la autoprotección fue vital para salvaguardar las viviendas.
El conseller de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, Vicenç Vidal, ha recordado "la importancia" que tiene la prevención porque, además del dispositivo que pone en marcha la Conselleria, "la seguridad empieza por uno mismo, con la creación de áreas con carga baja de combustible, alrededor de las viviendas y urbanizaciones que estén en zona forestal".
En cuanto al dispositivo de la Conselleria para las tareas de extinción, está formado por 350 personas, entre ingenieros e ingenieros técnicos forestales, agentes de medio ambiente, capataces y componentes de brigada, personal de autobomba, vigilantes, entre otros.
