La Policía Local de Palma ha levantado un total de 1.549 multas por realizar botellón en la vía pública en los primeros seis meses de este año, siendo mayo el mes en que más sanciones se han impuesto, con un total de 333 actas, que supera a las 283 de abril y a las 295 con que se cerraron cada uno de los meses de febrero y marzo. En enero fueron 183 denuncias.
Y, por lo que respecta al mes de junio, si bien los datos son parciales, ya hay registradas 160 nuevas multas. Siendo destacable que con la relajación de las medidas sanitarias, en concreto con el fin de la limitación de tráfico nocturno, ha aumentado el número de actas levantadas.
La Ordenanza reguladora del uso cívico de los espacios públicos (Orucep), regula el botellón, y se vele por su cumplimiento mediante dispositivos policiales en coordinación estrecha con la Policía Nacional, que siempre tienen una vertiente de prevención, disuasión y dispersión y se realizan desde un enfoque de congruencia, oportunidad y proporcionalidad.
Sin embargo, este tipo de dispositivos solo es una parte de la actividad que realiza a diario la Policía de Palma que, durante esta situación excepcional, atiende tanto el devenir ordinario de la capital balear como la actuación derivada de la emergencia sanitaria.
Entre otras actuaciones, este cuerpo realiza controles de licencias y de normativa Covid a los establecimientos de ocio nocturno en coordinación con el Cuerpo de Inspección del Gobierno; atiende al cierre de playas, al de parques y jardines; velatorio por el cumplimiento de las normas de tráfico... y pose especial énfasis en la reactivación de la Policía de Barrio.
Régimen sancionador
- Infracciones muy graves: multa de 1.500,01 hasta 3.000 euros.
- Infracciones graves: multa de 750,01 hasta 1.500 euros.
- Infracciones leves: de 100 hasta 750 euros.
