Los ocho detenidos en la 'Operación Alssariq', desarrollada este lunes por la Policía Nacional en las barriadas palmesanas de Pere Garau y Nuredduna, han pasado este miércoles por la tarde a disposición judicial.
Según fuentes policiales, los implicados en esta red formaban un grupo criminal investigado por delitos contra el patrimonio y favorecimiento de la inmigración ilegal. La investigación sigue abierta y las diligencias están declaradas secretas.
En cualquier caso, los agentes dan por desarticulado el grupo, que presuntamente se dedicaba a traer migrantes a Palma para luego delinquir, y que residían en pisos okupas. Se trata de la última fase de la investigación, y en las anteriores fueron detenidas cinco personas.
En concreto, fueron detenidos un menor, que ingresó en un centro de reforma, y cuatro adultos, uno de ellos miembro de pleno derecho de la organización y los otros tres colaboradores ocasionales.
