jueves. 28.03.2024
Manifestantes durante una nueva protesta contra el cierre de la restauración aprobada por el Govern para frenar la propagación de la COVID-19, en Palma de Mallorca, Mallorca, Islas Baleares, a 22 de enero de 2021. En esta ocasión la protesta es motorizada y cuenta con la autorización de la Delegación del Gobierno, no como la que se convocó el pasado 12 de enero. La marcha ha partido del Parc de la Mar para terminar en el Consolat de Mar, sede del Gobierno balear.
Manifestantes durante una nueva protesta contra el cierre de la restauración aprobada por el Govern para frenar la propagación de la COVID-19, en Palma de Mallorca, Mallorca, Islas Baleares, a 22 de enero de 2021. En esta ocasión la protesta es motorizada y cuenta con la autorización de la Delegación del Gobierno, no como la que se convocó el pasado 12 de enero. La marcha ha partido del Parc de la Mar para terminar en el Consolat de Mar, sede del Gobierno balear.

Alrededor de un millar de personas a pie y unos 850 vehículos, según cifras de la Policía Nacional, han salido este viernes a las calles en Palma a protestar contra el cierre de la hostelería, una de las medidas del Govern para frenar la expansión del COVID-19 en Baleares.

Con esta movilización, los afectados buscan reclamar más ayudas para un sector especialmente golpeado por la pandemia. Con todo, aunque la marcha se había promovido por parte de un grupo de hosteleros, a la manifestación se han sumado profesionales de otros colectivos también afectados por el coronavirus.

La Delegación del Gobierno había autorizado una marcha motorizada, con la condición de que los conductores no salieran de sus vehículos -como precaución ante el COVID-19-, pero no una protesta a pie. Sin embargo, hacia las 10.30 horas, ya unas 400 personas se encontraban congregadas en los alrededores de la avenida Adolfo Suárez, junto a una cuarentena de coches.

Al inicio de la marcha, hacia las 11.00 horas, un grupo de manifestantes a pie ha invadido la calzada con una pancarta, ignorando las indicaciones de la Policía. Algunos asistentes se han encaramado a la medianera de hormigón que separa los dos sentidos de la circulación.

Caen cuatro árboles

Más tarde una fuerte racha de viento ha soplado sobre los manifestantes, acompañada de lluvia, obligándoles a retroceder. Cabe recordar que Mallorca tiene activos este viernes avisos meteorológicos de nivel amarillo por viento y naranja por oleaje.

De hecho, cuatro árboles han caído en la zona -una en Paseo Sagrera, ante la Conselleria de Presidencia, y el resto en el punto inicial de la manifestación-, por lo que la Policía ha tratado de mantener a los asistentes alejados de zonas arboladas. Con todo, no hay constancia de heridos.

El vehículo de uno de los promotores del movimiento que ha impulsado la protesta, Víctor Sánchez, abría la marcha ondeando banderas de España. Tras la cola de coches -que ha llegado a ocupar al menos unos tres kilómetros de calles- se situaba un grupo de manifestantes a pie, con pancartas y haciendo sonar cacerolas, al grito de 'Armengol dimisión'.

Durante el recorrido, los manifestantes han recibido apoyo de algunos ciudadanos que paseaban por el centro de la ciudad o que se han asomado a los balcones para aplaudirles y saludarles. Al pasar por delante de los juzgados de Palma, se han podido escuchar gritos de "libertad" o "Armengol a prisión".

Protesta a pie

Tras completar al recorrido, que abarcaba unos seis kilómetros, los organizadores han aparcado sus vehículos y han esperado en las inmediaciones del Consolat de Mar. La sede del Govern se encontraba vallada por el riesgo de caída de árboles y custodiada por una importante presencia policial.

Cuando la manifestación en coche ya se había disuelto, al llegar el grupo que iba a pie ha comenzado una protesta ante el Consolat. En ella se han podido escuchar cánticos como "a por ellos", "Armengol dimisión" y "queremos trabajar", entre otros.

Después de esto, un grupo de unas 500 personas se ha dirigido hacia el Parlament, donde han continuado gritando consignas y exhibiendo pancartas. Se han escuchado algunos insultos a la presidenta -a la que han llamado "borracha"- y también alusiones al escándalo de explotación sexual de menores tuteladas por el Consell, al grito de "¿dónde están las niñas tuteladas?".

Un manifestante reducido y detenido

En la plaza de Cort, los manifestantes han encontrado a su llegada a una veintena de policías locales y nacionales custodiando el edificio, formando un muro. La protesta ha continuado y un manifestante ha llegado a lanzar un huevo contra los policías.

En un momento dado, uno de los participantes ha comenzado a increpar al convocante de la concentración motorizada, Ángel Galeote, porque éste deseaba marcharse. Al parecer, los agentes han intervenido para separarlos y se han llevado aparte al manifestante, detrás de un furgón policial, mientras que Galeote ha sido conducido a unos metros de distancia.

Entonces, un tercer manifestante se ha abalanzado corriendo en esa dirección, y unos agentes le han interceptado y reducido, mientras el resto formaba un muro para evitar que nadie pasara. Posteriormente se lo han llevado detenido por resistencia y desobediencia y atentado a la autoridad.

Según la Policía, el hombre ha desobedecido a los agentes, se ha encarado y ha hecho amago de lanzarles un objeto. Se trata de una persona que ya tuvo una participación muy activa en la manifestación del pasado 12 de enero.

Identifican a los manifestantes que no querían irse

Posteriormente han ido partiendo asistentes, hasta que ha quedado alrededor de una quincena que insistía en no abandonar el lugar. Tras unos minutos la Policía ha comenzado a identificarlos.

Momentos antes, Galeote había explicado, en declaraciones a los medios, que aunque la protesta a pie no estaba autorizada, al ver "tanta gente" había decidido "junto a la Policía" acompañarles para "llevarlos por el camino y dirigirlos un poco". En este sentido, ha negado que él los haya "instigado", sino que se ha limitado a "dirigirlos para que todo saliese bien".

El convocante de la protesta también ha dicho no tener "miedo" de posibles sanciones, asegurando que si le vuelven a multar pagarán la sanción "entre todos".

Insultos a periodistas de IB3

Al igual que ocurrió en la concentración de la semana pasada, los asistentes han vuelto a increpar a periodistas de IB3 acusándoles de "manipulación". Un redactor ha explicado que incluso les han escupido.

Por otro lado, a la concentración se han incorporado representantes de Vox Baleares, que han saludado a uno de los promotores de la movilización, Víctor Sánchez, para mostrarle su apoyo. El portavoz de Vox en el Parlament balear, Jorge Campos, ha asegurado que es una protesta "justa" y "necesaria" que "debería repetirse constantemente".

En declaraciones a los medios, ha afirmado que "la gente no puede más y ha dicho basta". "Aquí hay muchas familias arruinadas, que no pueden seguir así. No se puede obligar a la gente a cerrar sus negocios si dar ayudas o bien dar unas ridículas", ha criticado.

El promotor afirma que es una marcha ''apolítica''

Al respecto, Víctor Sánchez ha asegurado que "cualquiera que quiera apoyar la movilización será bienvenido" aunque ha recalcado que "esta manifestación es apolítica".

"No tenemos partidos ni colores, lo que queremos es trabajar, cuando nos lo están prohibiendo", ha enfatizado Sánchez, quien ha hecho hincapié en que "se espera que tras esta marcha el Govern se movilice y conceda una amnistía temporal para que las ayudas anunciadas lleguen a todos".

PIMECO apoya la protesta

La Asociación del Pequeño y Mediano Comercio de Palma (Pimeco)se ha sumado este viernes a la manifestación. Según ha informado el presidente de Pimeco, Toni Fuster, el motivo por el que han decidido sumarse a la concentración organizada esta jornada ha sido para denunciar lo que consideran una "mala gestión" en las ayudas, a las que han calificado de "ridículas", y para pedir a las autoridades que estas sean directas y mensuales.

"Compartimos las angustias del sector empresarial y exigimos a los gobernantes que trabaje, muy dura, que vayan a Madrid, a donde haga falta, para que el autónomo, el pequeño empresario, tenga ayudas de verdad, no ayudas a cuenta gotas como se han tenido hasta ahora", ha afirmado al respecto la vicepresidenta de Pimeco, Carolina Domingo.

Cerca de un millar de personas marchan por el cierre de la hostelería en Palma