
Un total de nueve vehículos estacionados en la vía pública fueron objeto de destrozos de distinta gravedad en la noche del pasado domingo, a causa de la acción de dos vándalos que ya han sido detenidos, y que actuaron en las barriadas palmesanas de Son Armadams y Santa Catalina.
Además, los sujetos también la emprendieron con el mobiliario urbano, arrancando papeleras municipales que luego arrojaron sobre los coches, e incluso un transformador eléctrico, incrementando de ese modo los daños causados, según ha subrayado la Policia Nacional.
Al parecer, se trata de dos hombres de origen colombiano, de 24 y 25 años de edad, a quienes se considera como presuntos autores de un delito de daños en mobiliario público y en vehículos. Por si fuera poco, uno de los detenidos profirió amenazas contra un conductor de uno de los vehículos dañados.
Los hechos se produjeron la noche del pasado domingo, sobre las 22:40 horas, en aquel momento se recibieron numerosas llamadas en la sala del 091 que alertaban de que dos jóvenes estaban golpeando varios vehículos estacionados en las calles y estaban dañando los mismos.
Siguiendo la pista de los destrozos
Varias patrullas se desplazaron al lugar siendo requeridos por algunos testigos y perjudicados que les indicaron el camino que habían tomado los jóvenes, dirigiéndose al encuentro de éstos y observando cómo estaban golpeando un transformador de luz, consiguiendo arrancarlo del suelo e impactarlo contra un vehículo provocando daños en el mismo.
Los agentes lograron interceptarlos y que depusieran su actitud, al mismo tiempo que se entrevistaron con varios testigos y perjudicados que se encontraban en la vía pública. Uno de ellos manifestó que habían dañado su vehículo y uno de los jóvenes le profirió amenazas de muerte.
Cristales y chapa dañados
Los agentes realizaron una inspección por el lugar indicado por las víctimas y testigos y comprobaron que había un total de nueve vehículos dañados con rotura de los espejos retrovisores y golpes en la chapa, además de localizar varias papeleras arrancadas, algunas de las cuales supuestamente fueron lanzadas contra los vehículos.