La Asociación Síndrome de Down de Baleares (Asnimo) y el colegio de educación especial Mater Misericordiae de Palma se han mostrado a favor de la petición europea para que se permita a niños con discapacidad estudiar en su lengua materna en entornos bilingües, como una medida de protección particular para estos alumnos.
Así lo han manifestado con motivo de la reciente aprobación en el Parlamento Europeo de una enmienda presentada por la eurodiputada de Ciudadanos Maite Pagazaurtundua, en la que se reclama a los estados miembros que velen para que los niños estén protegidos contra todo tipo de discriminación en el ámbito de la educación.
En particular, el texto pide que los niños cuya discapacidad implique problemas de desarrollo del lenguaje, como los trastornos del espectro autista, reciban una protección particular cuando su educación se produzca en entornos multilingües, para que puedan estudiar, si sus familias lo desean, en su lengua materna.
No añadir dificultades a los niños
Sobre esta petición, el director de Asnimo, Bartolomé Márquez, ha asegurado en declaraciones a Europa Press que desde la asociación respetan mucho el tema de la lengua materna, puesto que "no se pueden añadir dificultades" a la hora de enseñar a alumnos con discapacidad. "El modelo de atención que tenemos pone en el centro al usuario, venga de donde venga y con la lengua que tenga", ha destacado.
El también vicepresidente de la Unión de Asociaciones, Centros y Federaciones de Asistencia a Personas con Discapacidad de Baleares (UNAC Baleares) ha considerado que no se trata de defender una lengua sobre la otra, sino de no añadir "obstáculos" a alumnos que de por sí ya tienen problemas de aprendizaje. "Buscamos siempre el medio con el que mejor podamos entendernos con el usuario en función de sus necesidades", ha señalado.
El director de Asnimo ha explicado que desde la entidad respaldan "completamente esta postura" y que se adaptan a la lengua materna de los alumnos siempre y cuando haya recursos para ello. "Tenemos personas con discapacidad que pueden venir de Sa Pobla y gente del extranjero", ha indicado Márquez, algo que ha asegurado que no supone un problema dado que la asociación se adapta "poniendo primero a la persona".
Mejoras en la calidad de vida
Por otro lado, desde el centro de educación especial Mater Misericordiae de Palma han señalado que siempre se escoge aquella lengua que facilite el aprendizaje al alumno, puesto que "el tema de las lenguas no es un asunto político". "Nosotros no entramos en si es castellano o catalán", han asegurado.
Por este motivo, Mater Misericordiae apoya la mención de la Eurocámara, ya que la finalidad del centro es "facilitar al máximo el aprendizaje" y, por tanto, "se utiliza la lengua que sea". Desde el centro también han considerado que se trata "mejorar la calidad de vida" de los alumnos con discapacidad.
El centro de Mater Misericordiae está situado en el barrio de Son Gotleu de la capital balear, donde acuden muchos alumnos extranjeros. "Hay familias que no hablan castellano, no se pueden poner más trabas", han indicado. Desde Mater han apuntado que lo más importante es integrar a los alumnos en el sistema educativo y se intenta hablar en su lengua materna sea el castellano, el catalán, el inglés o cualquier otra. "Lo que sea mejor para nuestros usuarios nosotros lo vamos a hacer", han añadido.