Una historia con final feliz. Así se define la historia que han vivido los propietarios de una pescadería de la barriada palmesana de Son Ferriol.
La historia se remonta al pasado miércoles, cuando un repartidor de la pescadería realizaba sus tareas de reparto en la zona del Coll d'en Rabassa. Éste bajo del vehículo, dejándose las llaves en su interior. "Sólo bajó para entregar una bolsa de hielo y cuando volvió, vio cómo alguien se llevaba la furgoneta de reparto", ha explicado María José, gerente propietaria del establecimiento.
De inmediato, las víctimas del robo, se pusieron en contacto con las autoridades para realizar las denuncias correspondientes a los hechos. También contactaron con diversas asociaciones de taxistas para que se pusieran en contacto con ellos, si se topaban con el vehículo robado por las carreteras de la isla.
¿Había género en el interior del vehículo en el momento del robo? Sí, desde luego la persona que se lo llevó, se habrá dado un buen festín. Han comentado los propietarios de la pescadería.
Tras dos días sin tener ningún tipo de información sobre el paradero de la furgoneta, este viernes han recibido una llamada confirmando la aparición de ésta en Santa Margalida. "Estamos muy contentos, hemos pasado estos días muy preocupados. han expresado los afectados.
La furgoneta en cuestión se trata de una Citroën Jumpy de color blanca.