Dicen que la unión hace la fuerza. La de los amigos de los animales es el mejor ejemplo. Hartos de los abusos a los que son sometidos los caballos de las galeras de Palma durante cada verano, más de 120.000 personas han pedido acabar con lo que consideran es una "explotación", a través de su firma en una petición de Change.org, impulsada por el activista Guillem Amengual, quien ha solicitado sustituirlas por coches eléctricos.
Las 120.000 firmas conseguidas por la formación que lidera Amengual, Progreso en Verde, serán registradas por la organización ecoanimalista en Cort.
"El Ayuntamiento de Palma ha incumplido varios acuerdos aprobados en el pleno del consistorio palmesano y le pedimos de forma urgente que tome medidas contra la explotación de los caballos", ha asegurado Amengual a Mallorca Confidencial.
"¿Qué hay detrás de las galeras de caballos?"
El defensor de los animales recuerda que "entre los acuerdos incumplidos por el Ayuntamiento de Palma se encuentra el cambio de ordenanza de transportes de galeras de caballos aprobado en 2014, el cambio de parada de la calle Conqueridor por estar en pendiente y ser perjudicial para los caballos, el cambio de parada de la Catedral por estar todo el día al sol y revisiones periódicas a los caballos para comprobar su estado de salud".
Amengual subraya que "son muchos los años de lucha para terminar con la explotación de los caballos y a día de hoy todo sigue igual. Se necesitan medidas valientes en materia de protección animal y éstas siguen sin llegar. ¿Por qué? ¿Qué hay detrás de las galeras de caballos?".
"Cada año tenemos que ver como los caballos están al borde de desfallecer sobre el asfalto y no se toman medidas y las pocas que hay los conductores de las galeras se las saltan sin consecuencias para ellos. Reciben un trato muy diferente a la de cualquier ciudadanos con las sanciones", agrega,
Con todo, ha añadido Amengual, "en Progreso en Verde lo tenemos muy claro, de llegar a las instituciones se utilizaran todos los mecanismos para que la explotación de los caballos pase a la historia en la ciudad de Palma y el resto de municipios donde se utiliza una práctica que avergüenza a miles de ciudadanos".
"No nos callarán"
"Los conductores de galeras han iniciado una guerra sucia contra Progreso en Verde, porque no pueden consentir que se diga la verdad sobre la explotación de los caballos. Pero pueden tener muy claro que no van a poder pararnos ni con mentiras, ni coacciones. No nos callarán", ha advertido el activista.
Además, subraya que "pueden usar las sucias artimañas de siempre o las mentiras, pero no nos van a amedrentar. El juego sucio esta vez no va a servir. Progreso en Verde seguirá denunciando la explotación animal sea quien sea el que tenga delante".
Infracciones
"Cada día, Cort deja de ingresar una importante suma de dinero por no sancionar las infracciones que cometen los conductores de las galeras en Palma", apunta.
Amengual subraya que "cada día transportan más pasajeros de los permitidos. Además, dejan al animal solo. Tampoco respetan las paradas y usan fustas para castigar a los caballos"
"Nos jugamos ver a los caballos desplomarse en el suelo"
"No se puede seguir manteniendo ni un día más la imagen de los caballos explotados en pleno verano, a altas temperaturas y en las condiciones en las que están. Tras más de tres meses de confinamiento, los caballos no están en condiciones de volver a realizar dicha actividad, tras su nulo ejercicio durante tanto tiempo. Nos jugamos ver a los caballos desplomarse en el suelo en los próximos días", alerta el animalista.
Los caballos de las galeras que tienen su zona de "descanso" en Camí Salard están en pésimas condiciones
Desde hace muchos meses, varias asociaciones han denunciado que los caballos apenas tienen libertad de movimiento y están en unas condiciones que podrían dañarse seriamente en su zona de descanso situada en Camí Salard.
"Las condiciones en las que están los caballos de las galeras son imperdonables. Pasan de ser explotados en las calles a malvivir en sus zonas de "descanso". Una vez más queda de manifiesto que el colectivo de conductores de las galeras puede hacer y deshacer a su antojo sin consecuencias. Si otro ciudadano tuviera a los caballos en tales circunstancias, ya se los habrían quitado y sancionado", declara Amengual.
Además, asegura que los caballos que residen en Camí Salard no tienen lugar para poder moverse, ya que fuera del "establo" de un metro cuadrado, solo hay escombros, galeras, coches y suciedad. "Da igual las veces que se denuncien las condiciones de los caballos, al Ayuntamiento de Palma no le importan lo más mínimo los animales", declara.
