Esta mañana la empresaria Neus Bonnín ha entregado al presidente de la Associació de Comerciants i Restauradors d’Inca, Pep Nicolau, la cantidad de 500 máscaras protectoras de uso individual. El objetivo de esta actuación es que estén disponibles para que los comercios locales puedan ofrecer las máximas garantías de seguridad a sus clientes una vez se pueda reiniciar la actividad.
«Gracias a donaciones como la que recibimos hoy esperamos que muy pronto nuestros comercios puedan reanudar el trabajo con toda la seguridad para los inquers y inqueras», ha subrayado Nicolau.
Aportando su granito de arena
«Desde el primer momento en que es declaró el estado de alarma el gobierno incluyó mi negocio dentro de los considerados esenciales, la mayor dificultad para poder seguir ejerciendo fue la de encontrar el material de seguridad y protección», ha comentado Bonnín. Ante esta crisis sanitaria mundial, la empresaria ha querido dar su apoyo al comercio local aportando su granito de arena.
Por su parte, Nicolau ha declarado que «existe una gran dificultad para que autónomos y pequeños empresarios tienen todavía a día de hoy para la adquisición de material de seguridad y protección, así como su elevado coste, lo que dificultará que muchos negocios puedan volver a reabrir sus puertas con todas las medidas de seguridad». Todos los presentes han destacado las preocupaciones respecto al pequeño comercio y el deseo para que pueda devuelve a su actividad con las medidas de protección adecuadas.
Remar todos juntos
Además, comprenden que son momentos de muchas dificultades, momentos de estar unidos y remar juntos, de ayudarse unos a otros. Por esta razón, Nicolau ha subrayado la importancia del acto de la empresaria porque pone de manifiesto un espíritu de colaboración desinteresada de lo que se beneficiará todo el colectivo y la población.
