viernes. 29.03.2024

El Real Mallorca vive momentos difíciles. Otra vez. Las tres derrotas consecutivas sufridas por el equipo bermellón, y la falta de reacción ante el cambio de técnico, han encendido las luces de alarma en los despachos de Son Moix y en todo el entorno mallorquinista, que ve cómo se repite la historia una temporada más: destituciones de entrenadores, juego inexistente, falta de resultados... y a luchar por la permanencia hasta el último suspiro.

Esta vez, y a falta de batallas por el poder, el enfrentamiento se ha trasladado a Twitter, donde durante el fin de semana el presidente de la entidad, Monti Galmés, ha entrado en el cuerpo a cuerpo con alguno de los seguidores del Mallorca de mayor 'pedigrí', como es el caso de Pello Amengual.

Malos síntomas todos para un equipo que la próxima jornada volverá a jugar lejos de Son Moix, esta vez en Soria. Un encuentro otra vez crucial ya que en caso de derrota los bermellones podrían quedar situados ya a más de un partudo de la salvación, de la que ahora le separan dos puntos.

En este contexto parece difícil que la propiedad rechace incorporar futbolistas en el mercado de invierno, a pesar de que no es la idea que masneja Maheta Molango. Se aventura una Navidad convulsa.

El Real Mallorca cae en descenso