4 de diciembre de 2016, 21:13
Fernando Vázquez prefiere ponerse la venda en los ojos y seguir al frente del Mallorca mientras la propiedad se lo permita. El técnico bermellón, que conduce al equipo hacia la zona de descenso, no ha querido responder a las preguntas relativas a su futuro en el banquillo, y se ha mostrado "optimista" respecto al futuro tras dos derrotas consecutivas.
El entrenador gallego insiste en "levantarse" porque "no queda otra", y lamenta los gritos de la grada reclamando al unísono su marcha aunque asegura no haberlos oído.