jueves. 28.03.2024
Aparcar en Palma vuelve a ser una misión casi imposible. No en vano, el Ajuntament de Palma ha recibido un millar de peticiones de bares y restaurantes para ocupar plazas de aparcamiento y así poder ampliar sus terrazas.

En una nota de prensa, Cort ha recordado este miércoles que, en mayo, se aprobó el decreto que lo permite para poder garantizar las medidas de distanciamiento social impuestas por el Ministerio de Sanidad debido al coronavirus.

En estos momentos, hay 820 terrazas autorizadas en Palma y cerca de un centenar de denegaciones. Estas son mayoritariamente por no cumplir con las condiciones que recoge el decreto: solicitud para ocupar plazas de carga y descarga, paradas de taxis, lugares que no coinciden con la fachada del establecimiento, etc.

El regidor de Participación Ciudadana y Gobierno Interior, Alberto Jarabo, ha explicado, durante la rueda de prensa, que la medida ha permitido que muchos establecimientos que no disponían de terraza hayan podido disponer de este espacio.

Jarabo ha insistido en que ha contribuido a la reactivación económica de la ciudad, favoreciendo la contratación directa de 4.000 personas que se encontraban en paro o que sufrían un ERTE.

Poco más de un centenar de actas levantadas

Desde que se aprobó el decreto la Policía Local ha levantado un total de 109 actas. De éstas, sólo 14 corresponden a un exceso de ocupación de espacio. Jarabo ha pedido a los restauradores que no se relajen en el cumplimiento del decreto.

Asimismo, el regidor de Cort ha señalado que, con la llegada del verano, se está comprobando "una relajación en el cumplimiento del decreto que no podemos permitir". "Hemos consensuado con las patronales la importancia de respetar las normas y advertirán de las consecuencias de los incumplimientos", ha recordado.

De este modo, Jarabo ha insistido en que se debe cumplir el horario de apertura que es hasta las 23:00 horas, ocupar sólo el espacio que les corresponde, retirar los elementos como mesas, sillas y sombrillas cuando se cierre el local, además de garantizar el cumplimiento de la distancia de seguridad entre las mesas.

Aparcar vuelve a ser un problema en Palma