jueves. 28.03.2024

El Servicio de Salut se prepara para habilitar cuatro hoteles para alojar pacientes con COVID-19 leves o asintomáticos. Estas instalaciones hoteleras se medicalizarán para poder acoger pacientes en un futuro, en el supuesto de que los centros sanitarios públicos y privados necesiten apoyo. El hotel Melià Palma Bay, junto al Palau de Congressos quedará habilitado este jueves para acoger pacientes si fuera necesario. 

Se podría disponer de otro hotel en Mallorca, de uno en Menorca y de otro en Eivissa. Actualmente se está verificando que estos establecimientos cuenten con las condiciones idóneas para acoger pacientes.

De momento, los hospitales de Baleares tiene suficiente capacidad 

La Conselleria de Salut i Consum destaca que, de momento, el sistema sanitario público y privado de las Islas Baleares tiene suficiente capacidad para atender las necesidades de todos los pacientes. Sin embargo, es necesario prever una alternativa en caso de que se incremente el número de casos y sea necesario descongestionar los recursos sanitarios de los que disponen las Islas Baleares.

Si se da este caso, los hoteles medicalizados estarán a punto para acoger pacientes, leves o asintomáticos, con COVID-19. También serán derivados a estas instalaciones aquellos que requieran aislamiento en los casos siguientes: que no dispongan de un domicilio, que su vivienda no sea adecuada para garantizar el aislamiento en condiciones óptimas, o que convivan con personas vulnerables.

El hotel Melià Palma Bay puede tener una capacidad máxima de 250 camas, distribuidas en 8 plantas. De momento, solo se ha habilitado la primera —con 35 habitaciones— que gestionará el Hospital Universitario Son Llàtzer. El personal sanitario que se prevé desplazar, si fuera necesario, es de aproximadamente unos 15 profesionales por planta.

El acondicionamiento de este establecimiento ha sido posible gracias a la colaboración del grupo Melià Hoteles, de la Brigada de Infantería Palma 47 del Ejército de Tierra y del Ayuntamiento de Palma. El operativo empezó lunes con el despliegue de veinticinco militares —organizados en diferentes turnos— que hicieron la distribución del mobiliario necesario para la adaptación. Ayer, los técnicos del Servicio de Salud y personal del Hospital Son Llàtzer prepararon todos los circuitos de entradas y salidas de pacientes, mapa de camas, lavandería, farmacia, enfermería, montaje de los sistemas informáticos, alimentación y recogida selectiva. Este miércoles, se ultimará la formación en prevención de riesgos laborales y la puesta a punto definitiva del establecimiento.

Salut podría contar con cuatro hoteles para pacientes leves o asintomáticos