El presidente del Parlament de Cataluña, Roger Torrent, ha declarado que espera un cambio de actitud con el nuevo Gobierno de Pedro Sánchez y que "la única decisión justa" respecto a los presos soberanistas y políticos en el extranjero sería su liberación y permitir su retorno libre, respectivamente. Además, ha manifestado que también ve necesario el acercamiento de los presos, ya que se trata de un tema de "derecho, tasado, regulado y que se tiene que producir sí o sí".
Torrent ha afirmado el Gobierno de Sánchez ha intentado "gestualmente" demostrar un cambio de actitud en relación al anterior Ejecutivo de Mariano Rajoy, pero que esperará a ver sus acciones para valorarlo.
También ha dicho que con la denuncia contra el juez instructor de la causa por el proceso soberanista, Pablo Llarena, y otros tres magistrados de la sala de apelaciones del Tribunal Supremo espera que haya justicia.
El líder catalán ha indicado que la denuncia es una síntesis de unos hechos que ha calificado de flagrantes y que constituyen una serie de aciones "que han impedido el normal funcionamiento del Parlament de Cataluña" y su libre expresión, afectando al conjunto de los ciudadanos, según ha dicho.
Ha insistido que con la presentación de la denuncia cumple un acuerdo de la mesa del Parlament y que le parecería "dejación de funciones" no defender los derechos fundamentales de los 135 diputados.
Torrent ha reiterado que "hay una politización de la justicia evidente" y que, en este caso, las decisiones se toman siguiendo no solo criterios jurídicos, sino también políticos, ha defendido.
Ha asegurado que esta causa terminará ante la justicia europea ya que, a su juicio, se están poniendo en cuestión pilares fundamentales de la democracia y el Estado de derecho, y ha considerado que es necesario que otros tribunales "sin influencias políticas" puedan tomar decisiones.