La gran afluencia de público y participantes en la Festa des Tondre de Es Llombards de este fin de semana ha demostrado que había muchas ganas de volver a celebrar este acontecimiento. Y es que después de dos años sin poder organizarla a causa de la pandemia, la convocatoria ha sido todo un éxito.
Las ovejas han pasado por la tijera de la mano de los payeses de Santanyí, a la manera tradicional, en el campo de fútbol de Can Martina, donde se han reunido centenares de visitantes para presenciar el espectáculo. En total unas 30 ovejas han sido esquiladas por una docena de esquiladores que se habían reunido en primera hora de la mañana para prepararlo todo. Después, a las 10.00 ha empezado la 'tosa', en la cual ha participado quien ha querido para aprender y disfrutar de la experiencia.
La alcaldesa de Santanyí, Maria Pons, acompañada por el alcalde pedáneo de Es Llombards, Mateu Nadal, tampoco se lo ha querido perder. Según ha explicado la primera edil, “esta es una de las fiestas más esperadas en nuestro término, y como hacía dos años que no la podíamos organizar, se ha notado que había muchas ganas. Es un gozo ver como la tradición se enseña a los más jóvenes, y como grandes y pequeños participan”.
Después del esquilado de las ovejas, ha sido el turno del espectáculo ecuestre a cargo de la Agrupación de Cavallistes de Ses Salinas. Y a mediodía se ha celebrado la comida de hermandad en la plaza des Pou, donde desde primera hora estaban abiertas las 'paradetes' de la feria artesana. El tarde se ha cerrado con la entrega de un recuerdo para todos los participantes, y un “tardeo” para despedir la fiesta.
Además, el programa de actos de la Festa des Tondre de este año, también ha incluído una muestra de 'ball de bot', en la que ha participado la escuela de baile Sa Mitja Lluna y la agrupación Mandalmar Ball de Bot.