viernes. 29.03.2024

No hay manera. A pesar de las constantes peticiones de las autoridades por respetar las medidas sanitarias, los hay que desafían lo establecido con conductas que distan mucho de ser ejemplares. No importa la edad. Y es que cuando los más jóvenes duermen o siguen bailando de escondidas durante el día, familias enteras acuden en masa a las playas. 

Muchos fueron los que vaticinaban una era postpandemia con una sociedad mucho más solidaria, sobre todo tras la experiencia del confinamiento. Un vaticinio que dista mucho de la 'nueva realidad', tal y como hemos comprobado durante las últimas semanas. En la 'nueva normalidad' parece lejana aquella época en los que los balcones se llenaban de aplausos. 

Fiestas ilegales y botellones señalaron a la juventud como principal causa de rebrotes. Así lo reconoció un Govern que mantiene su veto al ocio nocturno mientras municipios tan importantes y representativos como Calvià y Andratx tienen que cerrar sus arenales por exceso de aforo. Y es que el incivismo no es cosa de edad. 

La invasión de los 'domingueros'

Un ejemplo ha tenido lugar este domingo por la mañana en la playa de Sant Elm. A las 10:00 horas, apenas 40 personas compartían la arena de este bello lugar. Todas ellas, respetando la distancia social. Poco después, sobre las 12:00 horas, la llegada de los conocidos como "domingueros" ha roto el necesario equilibrio. Entonces, entre sombrillas y neveras, apenas quedaba espacio.

Ante tal descontrol, la Policía Local d'Andratx se ha desplazado hasta el lugar para desalojarlo. Con la bandera roja ondeando y a sonido de silbatos, los presentes han sido olbligados a abandonar el lugar. Los socorristas también han colaborado con los agentes demandando celeridad a los bañistas que permanecían en el agua. 

La playa de Sant Elm, desalojada por exceso de 'domingueros'