miércoles. 21.05.2025

«¡Con Rivera no!», le gritaban a Pedro Sánchez en la sede de Ferraz

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez

El pueblo español se ha pronunciado en las urnas. Dos años después de ser cesado como líder del PSOE y volver como ganador de las segundas primarias del partido, Pedro Sánchez suma 123 diputados y más del 28% de los votos. El Partido Popular se desploma hasta alcanzar el peor resultado de su historia, tan sólo 66 diputados. Le pisa los talones la formación de Albert Rivera, que se sitúa en el tercer puesto con 57 escaños y a poco de dar el sorpasso a los populares. Previsiblemente Unidas Podemos será el socio principal de los socialistas, que necesitan pactar para gobernar.

Una vez realizado el recuento, los líderes de las respectivas formaciones han valorado los resultados desde las sedes de sus formaciones.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez

«¡Con Rivera no!», le gritaban a Pedro Sánchez

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha celebrado este domingo la victoria del PSOE en las elecciones generales ante centenares de militantes y simpatizantes congregados a las puertas de la sede del partido en Ferraz. El líder socialista se ha comprometido a gobernar «tendiendo la mano» a todos los partidos, pero la multitud ha comenzado a gritar: «¡Con Rivera no!», en varias ocasiones.

«Lo he escuchado. Creo que ha quedado bastante claro», les ha respondido Sánchez desde una plataforma colocada al lado de la entrada del garaje de la sede del PSOE, desde donde ha salido a saludar a la gente acompañado de su mujer, Begoña Gómez; de la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo; de la 'número dos' del PSOE, Adriana Lastra; la presidenta del partido, Cristina Narbona, y el secretario de Organizació, José Luis Ábalos.

Frente a la petición de la multitud para que no gobierne con Rivera, Sánchez ha advertido de que el PSOE no va a poner cordones sanitarios como hizo en la campaña Ciudadanos con el PSOE. La «única condición» que los socialistas pondrán para pactar será «respetar la Constitución» y los tres objetivos que el PSOE se fijó en esta campaña: avanzar en justicia social, en convivencia entre territorios y en ejemplaridad en el ejercicio de la política.

En cualquier caso, Sánchez ha mostrado su convencimiento de que conseguirá gobernar. «Se trataba de ganar y gobernar. Hemos ganado las elecciones y vamos a gobernar», ha asegurado, comprometiéndose a ser el presidente de todos los españoles.

«Hemos hecho que pase y con ello ha ganado el futuro y ha perdido el pasado», ha subrayado entre los aplausos del público que le escuchaba, ante quienes ha puesto en valor que se trata de la primera victoria de su partido en unas generales en 11 años, que han contado con una alta participación en defensa de la democracia española.

Mensaje del presidente

Sánchez ha remarcado que esta victoria del PSOE lanza también el mensaje a Europa y al mundo de que «se puede ganar a la involución con propuestas». «¡No queremos la involución, la reacción, el retroceso. Queremos un país que avance!», ha gritado, provocando que el público comenzase a corear «¡no pasarán!» y «sí se puede».

Pero también ha querido reivindicarse recordando aquel 2016 en que su oposición a permitir la investidura de Mariano Rajoy le forzó a dimitir por el pulso que libró, y perdió, con sus críticos dentro del partido. «Nos decían que este partido no tenía futuro, que nos teníamos que resignar a que gobernara el PP y aquí estamos (...) reivindicando el presente y el futuro de un partido centenario», ha subrayado.

«Viva España y viva el socialismo», ha comenzado a cantar la multitud. Sánchez les ha dado la razón, reconociendo que eso es lo que ha ganado este domingo: «Una España plural que se reconoce en su diversidad».

Sánchez ha terminado su intervención haciendo un llamamiento a la necesidad de conformar mayorías progresistas en los ayuntamientos y las Comunidades Autónomas en los próximos comicios del 26 de mayo. «Vamos a construir esa España que queremos», ha dicho como despedida.

Ciudadanos: «Vamos a liderar y a controlar a este Gobierno»

Al conocer los resultados electorales, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha dado por hecho que el PSOE gobernará con Podemos y los nacionalistas, lo que ha calificado de «mala noticia», aunque ha dicho que hay otra buena, que Ciudadanos hará una oposición leal a la Constitución y acabará gobernando España.

Muy contento por los resultados, se ha dirigido a las decenas de militantes y simpatizantes que le esperaban en el exterior para proclamarse líder de la oposición a Pedro Sánchez.

«Sánchez e Iglesias van a formar Gobierno con los nacionalistas», ha aseverado Rivera, que ha defendido que su partido «se erige como la esperanza y la ilusión del futuro de España» y que «los líderes de la oposición van a ser los diputados de Ciudadanos».

Rivera ha prometido hacer una oposición que vigile «muy de cerca» al hipotético Gobierno de Sánchez e Iglesias «para que no machaquen a las familias y a las clases medias» y «para que no hagan ocurrencias», y ha definido a Ciudadanos como «el refugio de la libertad» ante el PSOE y Podemos, que a su juicio «se van a olvidar de una parte de España». «Vamos a liderar y a controlar a este Gobierno», ha asegurado.

Acompañado de las principales caras visibles de la formación naranja, ha alegado, por otro lado, que en las distintas convocatorias electorales «siempre hay un partido que crece más que nadie», Ciudadanos, que ha definido como «el partido que más se parece a España y el proyecto que más se parece a la sociedad civil española».

José Ramón Bauzá, presente

Por ello, Rivera se ha mostrado convencido de que Ciudadanos acabará por «gobernar España» y considera que los resultados cosechados en esta jornada electoral no hacen más que refrendar su condición de «proyecto ganador» y darle «un salto cualitativo».

«Os prometo que más pronto que tarde (...) vamos a gobernar España», ha concluido Rivera antes de despedirse de sus militantes, entre los que estaban algunos de muy reciente afiliación, como el expresidente de la Comunidad de Madrid Ángel Garrido y el expresidente de las Islas Baleares José Ramón Bauzá. El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, se ha mostrado orgulloso de los resultados electorales.

Desolación en la sede del PP

Casado se ha mostrado abatido durante la rueda de prensa. «Los resultados han sido muy malos. Por eso nos vamos a poner a trabajar». Y ha puesto la mirada en los próximos comicios del 26 de mayo. Dicho esto, ha pedido además al PSOE un Gobierno sin los independentistas.

«Siempre he dicho que el PSOE es un gran partido, clave en la historia reciente de España y espero que, visto el resultado de esta noche, pueda llegar a acuerdos de gobernabilidad sin necesitar a los independentistas. Para el PP lo primero es España y en este caso esperemos que nuestro país esté a la altura de las circunstancias», ha proclamado.

Así se ha pronunciado en una comparecencia sin preguntas en la sede del PP, al filo de la medianoche, rodeado de los miembros de la dirección nacional y candidatos al Congreso.

También le esperaban en la sala desde las 23.30 horas más de un centenar de jóvenes de Nuevas Generaciones. Todos ellos han brindado un fuerte aplauso al líder del PP tanto a su llegada como a su salida de la sala de prensa.

Casado ha abierto su comparecencia recordando que él es «especialista» en comparecer en la sala de prensa del PP en noches electorales «complicadas». «Aquí hay un gran partido que sabe estar a las duras y a las maduras», ha resaltado, para agradecer a los más de cuatro millones de españoles que «siguen confiando en el PP para seguir siendo el partido líder de la oposición y del centro-derecha».

Después, ha felicitado a Pedro Sánchez y al PSOE por su victoria en las elecciones y ha añadido que ya ha tenido la oportunidad de hacerlo por teléfono. Eso sí, ha aprovechado para pedir al Partido Socialista acuerdos de gobernabilidad sin los independentistas. Los socialistas han logrado 123 escaños y sumaría mayoría absoluta con los 57 escaños de Cs.

Casado ha admitido que el resultado del PP es «muy malo» y ha añadido que llevan varias citas electorales perdiendo apoyos. Por eso, ha prometido ponerse a trabajar «con la máxima ilusión y responsabilidad para recuperar ese apoyo y liderando el espacio de centro-derecha».

En su comparecencia, ha alertado de que la fragmentación del espacio de centro-derecha perjudica a los tres partidos en el reparto de escaños y ha añadido que por eso el PP ofreció acuerdos preelectorales. «El tiempo nos ha dado la razón y con esta ley electoral hace que se haya castigado muchísimo la fragmentación y todos los partidos, no solo nosotros, tendrán que hacer un ejercicio de análisis si ha merecido la pena ese enfrentamiento contra el PP, sobre todo los últimos días de campaña, a la luz de los resultados», ha enfatizado.

Casado ha señalado que la campaña ha coincidido con la Semana Santa y a pocas semanas de las municipales y autonómicas, algo que, a su juicio, estaba «bien medido» para que el PSOE pudiera «optimizar» el resultado. Sin embargo, ha defendido la importancia de unirse, de forma que el centro-derecha haga una estrategia de campaña que permita ver a los votantes de este espacio que la fragmentación «solo ha favorecido un Gobierno de Sánchez».

Unidas Podemos: «Pedro Sánchez debe evitar la tentación naranja»

Pablo Iglesias ha asegurado que les hubiese gustado un resultado mejor pero ha defendido que «son suficientes para frenar a la derecha y para construir un gobierno de coalición de izquierdas».

Además ha adelantado que ya ha felicitado a Pedro Sánchez y han quedado en reunirse para valorar un posible pacto; para ofrecerle formar «un Gobierno de coalición de izquierdas».

Ha indicado que los resultados dejan claro que el peso parlamentario del bloque progresista «supera al peso del bloque de las tres derechas, del trío de Colón».

Como segunda lectura de los resultados, Iglesias ha destacado que el resultado electoral arroja también que «España es plurinacional». «Algo que hemos dicho muchas veces, y en lo que nos hemos quedado solos, es plurinacional y basta ver el resultado en Euskadi y Cataluña para comprobar que esta afirmación es obvia», ha añadido.

Iglesias también ha hecho autocrítica sobre los resultados señalando que les hubiera gustado que fuera «mejor», pero ha calificado de «suficiente» el número de escaños para lograr por un lado «frenar a la derecha y a la extrema derecha» y por otro «construir un Gobierno de coalición de izquierdas».

«Toca trabajar mucho, con mucha discreción, tenderemos muchas reuniones, hay que hacer un programa de gobierno y cumpliremos el mandato con el que salimos a estas elecciones de trabajar para que en España haya un gobierno de coalición de izquierdas que sea capaz de llevar a cabo políticas que protejan a las mayorías sociales», ha añadido.

Abascal habla de "reconquista"

El presidente de Vox ha advertido este domingo que la entrada del partido en el Congreso con 24 diputados es «solo el principio» y ha asegurado que han «venido para quedarse».

«Os dijimos que empezábamos una reconquista y eso es justo lo que hemos hecho», ha dicho en su intervención tras el escrutinio ante los simpatizantes y afiliados del partido congregados en la plaza madrileña de Margaret Thatcher, próxima a Colón.

Arropado por sus máximos colaboradores, Javier Ortega Smith, Iván Espinosa de los Monteros y Rocío Monasterio, el líder de Vox ha querido dar «gracias emocionadas» a los 2,5 millones de «compatriotas» que les han votado.

También a los interventores y apoderados, a los 50.000 afiliados y a los miles de españoles que les han acompañado en los mítines más multitudinarios de la campaña. «No les vamos a defraudar», ha asegurado y ha insistido en que, desde el Congreso, seguirán lanzando su «mensaje de unidad nacional».

Abascal ha considerado que Vox ha cumplido con su obligación al haber pasado en tres años de 40.000 a 2,5 millones de votos. «Se ha producido verdaderamente un milagro», ha dicho y ha advertido a «los que están en la calle un poco más arriba», en alusión al PP, que son los únicos responsables de que la izquierda vaya a seguir gobernando.

«Hoy es momento de alegría, pero también de preocupación», porque «no ha sido posible expulsar al Frente Popular», ha dicho el líder del partido de extrema derecha antes de agregar que tras este domingo, «España está en una situación peor que ayer, pero eso significa que Vox es más necesario hoy que ayer», porque es una «garantía».

Se ha comprometido así a que sus 24 diputados incidan en el Congreso que «la unidad de España ni se debate ni se vota ni se discute, sino que se defiende hasta las últimas consecuencias».

«En el Parlamento nacional habrá una resistencia nacional ante las posturas y posiciones liberticidas», ha subrayado y, tras expresar su «profundo respeto» al resultado electoral, ha advertido de que ninguna mayoría habilita para una reforma electoral que tolere una referéndum en una parte del Estado.

En este sentido, ha advertido de que utilizarán «todos los resortes del Estado» para defender la Constitución, el sistema democrático y el imperio de la ley.

«¡Con Rivera no!», le gritaban a Pedro Sánchez en la sede de Ferraz