El Rey ha constatado en su ronda de consultas con los partidos políticos que no existe un candidato que reúna los apoyos necesarios para lograr ser investido presidente del Gobierno por el Congreso de los Diputados. Por lo tanto, Felipe VI ha comunicado a la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, "que no formula una propuesta de candidato a la Presidencia del Gobierno", según dice el comunicado, que no habla expresamente de convocar nuevas elecciones pero sí remite al artículo 99 de la Constitución.
El artículo 99.5 señala que "si transcurrido el plazo de dos meses, a partir de la primera votación de investidura, ningún candidato hubiere obtenido la confianza del Congreso, el Rey disolverá ambas Cámaras y convocará nuevas elecciones con el refrendo del Presidente del Congreso". Ese plazo de dos meses se cumple el lunes 23 de septiembre, después de que el mes de julio el socialista, Pedro Sánchez, no lograse el respaldo del Congreso para ser presidente del Gobierno. Así, las elecciones serán el 10 de noviembre.
El Rey no propone candidato a la investidura y habrá elecciones generales el 10 de noviembre
No es la primera vez que se aplica
Esta es la segunda vez en democracia que se aplica el artículo 99.5 de la Carta Magna y, de hecho, el comunicado de la Casa del Rey es muy similar al que difundió el 26 de abril de 2016. En aquella ocasión, la falta de acuerdos tras el resultado de las elecciones del 20 de diciembre de 2015 no permitió investir presidente y los españoles volvieron a las urnas el 26 de junio de 2016.
Pedro Sánchez: "El país se ve abocado a la repetición de elecciones"
Después de que el Rey Felipe VI ha concluido la ronda de consultas y ha constatado que no hay apoyo suficiente para ir a una nueva investidura, el presidente del Gobierno en funciones Pedro Sánchez, ha asegurado que "el país se ve abocado a la repetición de elecciones" el próximo 10 de noviembre.
Sánchez ha precisado que estas consultas han arrojado un resultado "claro" y es que no hay mayoría en el Congreso que garantice la formación de un Gobierno.
Pide a los ciudadanos que "lo digan más claro" el 10-N para que no haya más bloqueos
Además, ha recordado que los españoles hablaron muy claro en las elecciones generales del 28 de abril y en las del 26 de mayo "en cuatro ocasiones". Pero ha culpado a PP, Ciudadanos y Unidas Podemos de no haber querido aplicar lo que dijeron las urnas.
"Desgraciadamente dos fuerzas conservadoras y una de izquierdas han preferido bloquear lo que dijeron las urnas", ha exclamado. Por ello, ha pedido a los españoles en rueda de prensa desde el Palacio de la Moncloa "que lo digan más claro" para que se pueda formar un "gobierno sólido y no haya más bloqueos".
Los españoles volverán a las urnas el 10 de noviembre, en las cuartas generales en cuatro años
Los españoles volverán a votar el 10 de noviembre, en la segunda repetición de unas generales del periodo democrático actual, tras el primer caso vivido en 2016 con el 'popular' Mariano Rajoy entonces al frente del Gobierno. Desde los comicios de diciembre de 2015, las del 10 de noviembre serán las cuartas generales que España celebra en los últimos cuatro años.
La fragmentación del Parlamento surgida de los comicios generales del año 2015, cuando Ciudadanos y Unidas Podemos irrumpieron con fuerza en el Congreso de los Diputados, ha ido pareja a una dificultad mayor de los partidos para ponerse de acuerdo y formar gobierno.
Ocurrió en 2016, cuando Rajoy no sumaba mayoría absoluta sólo con Ciudadanos y dependía de la abstención del PSOE para ser investido, requisito que logró tras una repetición de las elecciones, cuando la presión de ir a unas terceras elecciones forzó la abstención de los diputados socialistas con un elevado coste: su líder, Pedro Sánchez, que se resistía a investir a Rajoy, fue defenestrado de la dirección del partido por sus críticos y la formación quedó fracturada en dos mitades.
El PSOE busca reforzarse como primera fuerza
Como ocurrió con el PP en 2016, el Gobierno afronta la repetición electoral con la confianza de ganar unos escaños más que refuercen su posición como primera fuerza y la relativa tranquilidad que ofrecen las encuestas, ninguna de las cuales detecta una posible suma de las tres derechas.
Tras los nuevos comicios, en la dirección del PSOE esperan que la presión sobre la oposición para que permita formar gobierno sea mayor que la habida desde el 28 de abril.