La Policía Nacional ha detenido en Palma tres veces en menos de una semana --dos de ellas, el mismo día-- a un hombre como presunto autor de 11 robos con fuerza en locales comerciales y una vivienda.
Según ha informado la Jefatura Superior de la Policía Nacional en Baleares, el sospechoso presuntamente entraba en los locales arrojando una piedra de grandes dimensiones contra los cristales, y una vez dentro iba a por la caja registradora "con violencia". Así se llevaba dinero y otros efectos.
La primera detención tuvo lugar el pasado viernes por la mañana, por parte de agentes del grupo de robos.
En esa ocasión se le detuvo por una tentativa de robo con fuerza en una vivienda del barrio de Bons Aires, ocurrido una semana antes. En el domicilio, la puerta había sido destrozada a patadas mientras los moradores se encontraban dentro de la casa, y el sospechoso había huido del lugar.
Ese mismo día, por la noche, sobre las 23.30 horas entró una llamada en el 091 por un incidente en un local de Son Armadams. Comunicaron que alguien había fracturado con una piedra de grandes dimensiones el cristal de un establecimiento y había accedido al interior.
Agentes de Policía se desplazaron al lugar y comprobaron que la puerta de cristal estaba rota. El interior del local estaba revuelto y había una piedra en el suelo.
Los policías dieron varias batidas por la zona, y vieron un segundo local con una puerta de cristal también fracturada. Como en el primer caso, había una piedra de grandes dimensiones en el interior, pero además hallaron gotas de sangre.
Posteriormente, entró otra llamada en el 091 en la que se comunicaba que en un tercer establecimiento se había producido una nueva intrusión. Al acudir los policías al lugar cazaron al hombre ' in fraganti', agazapado con una mochila.
Los agentes identificaron al sospechoso y advirtieron que tenía sangre en la mano. Entre sus pertenencias encontraron unas cizallas y un gorro. En este tercer establecimiento la puerta presentaba daños semejantes a los anteriores, y también el interior estaba revuelto.
Por ello, el hombre fue detenido por estos tres robos con fuerza en locales, cometidos en menos de una hora. En esta segunda detención, los agentes comprobaron que otros compañeros habían detenido al hombre ese mismo día.
Detenido de nuevo a los cuatro días
Al cabo de cuatro días, el hombre volvió a ser arrestado por otros siete robos en establecimientos. Los robos se cometieron de madrugada en un restaurante, una peluquería, establecimientos de alimentación y otros comercios.
Al igual que en los casos de unos días antes, el ladrón había fracturado la puerta de entrada, la mayoría de veces con una piedra, y una vez dentro se había llevado el dinero de la caja registradora y efectos de valor.
Así, el pasado martes, sobre las 19.20 horas, volvió a ser detenido por agentes del grupo de robos de la Policía Nacional.