viernes. 29.03.2024
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La pandemia de COVID-19 se ha cebado sobre la población en edad avanzada.

La primera ola de la pandemia de la COVID-19 en Baleares dejó como resultado que una de cada tres muertes se registró en residencias de mayores, según revela un estudio de la Universitat de les Illes Balears (UIB).

Se trata de una de las conclusiones de los 23 trabajos que forman parte del 'Anuario de Envejecimiento 2020' que ha presentado este jueves en rueda de prensa la directora del Anuario y catedrática de la UIB, Carmen Orte.

El Anuario del Envejecimiento es el resultado de la colaboración entre la Conselleria de Asuntos Sociales y Deportes del Govern, el Departamento de Derechos Sociales del Consell de Mallorca y la UIB.

En éste, se tratan temas diversos relacionados con las personas mayores, aunque este año el análisis de los expertos se ha centrado sobre todo en el modo en que la COVID-19 ha afectado a este colectivo.

Impacto sobre los mayores

Uno de los trabajos que recoge el anuario es 'La primera ola de la COVID-19 en Baleares: reflexiones generales, análisis de datos y repercusiones sobre la tercera edad', realizado por Ferran Dídac Lluch i Dubon. Donde se extraen algunas conclusiones generales aprendidas de la COVID-19 y, sobre todo, del impacto que ha generado esta enfermedad en los mayores.

Según ha explicado Lluch, la edad es un claro factor de riesgo y la población geriátrica en centros ha resultado "dramáticamente afectada" por la pandemia. Además, durante la primera ola el 10% dels casos sintomáticos y una de cada tres defunciones en las Islas se registraron en residencias de mayores.

El estudio de Lluch también pone de relieve que la COVID-19 contribuye al crecimiento de la pobreza extrema global y al aumento de personas de nuestro entorno que necesitan ayuda para llegar a fin de mes. "Las investigaciones actuales son esperanzadoras, pero hay que demostrar la eficacia de la vacuna", ha indicado.

Por otra parte, durante la presentación del anuario, también se ha destacado el estudio 'Atender en casa, una de las alternativas en la atención de las personas mayores durante la pandemia', realizado por Sofía Alonso Bigler.

Más atención a domicilio en el futuro

Alonso ha resaltado que la pandemia ha mostrado la necesidad de revisar los modelos de cuidados a las personas mayores, por lo que ha explicado que la atención a domicilio es una alternativa que tiene numerosos beneficios para este colectivo.

Entre otros, ha asegurado que en casa la persona puede recibir una atención individualizada y esto suele contribuir a una recuperación más rápida. Asimismo, el hecho de que una persona mayor siga en su entorno contribuye a su bienestar emocional y le permite continuar con sus rutinas diarias.

"La crisis sanitaria provocada por la COVID-19 ha hecho que la palabra 'residencia' se asociase a un número considerable de contagios y desgraciadamente también a la suma de las personas que nos han dejado durante todo este tiempo", ha lamentado.

La primera ola de COVID-19 en Baleares dejó uno de cada tres muertos en residencias