Desde hace unas semanas se está escuchando que diferentes YouTubers españoles están trasladándose al país vecino, Andorra. El Rubius, uno de los streamers con más suscriptores de España anunció que se trasladaba a vivir a Andorra. "Me hubiese ido hace muchos años. Literalmente, todos mis amigos están allí", se justificó en uno de sus directos a través de la plataforma Twitch, refiriéndose a otros streamers como Willyrex, Vegetta o The Grefg, entre otros, quienes hace ya tiempo se mudaron a Andorra, convertida en los últimos cuatro o cinco años en un auténtico paraíso youtuber. Pero, ¿por qué se mudan?.
"El Rubius se va a Andorra, como todos los otros, para pagar menos impuestos", responde sin ambages Carlos Cruzado, presidente del Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha). El propio Rubius admitió que pagar menos a Hacienda era "un plus" para tomar la decisión de mudarse a Andorra.
Es tal la “fuga” de Youtubers desde 2016 que actualmente de los 10 con más suscriptores de España, seis viven en el país vecino. Una de las causas que se atribuye al éxodo de streamers es que en Andorra, el Impuesto de la Renta (IRPF) tiene un tipo máximo del 10%, muy lejos del máximo del 46% que está vigente en España que con algún tramo autonómico ese máximo puede ser incluso del 52%.
Aunque en 2018 la Unión Europea dejó de considerar a Andorra un paraíso fiscal, este territorio sigue siendo un edén para los youtubers. Vivir allí les sale a cuenta. El Rubius, cuyos ingresos anuales están estimados en algo más de cuatro millones de euros al año, pagaría casi dos millones de euros en impuestos en España y sólo 400.000 en Andorra.
El traslado de El Rubius ha tenido un gran eco mediático y ha reabierto un debate recurrente, el de si es ético pagar menos impuestos de los que corresponden. A lo largo de la semana han sido numerosas las voces que han opinado, algunas tan conocidas como la del presentador Dani Mateo y otros streamers famosos como Alexelcapo o Ibai Llanos, quien en un discurso que se hizo viral afirmaba que es partidario de que los que más ganan paguen más impuestos y que él no se va a ninguna parte.
Más allá de ese debate con tintes morales, hay una derivada que también se ha planteado esta semana, la de si es posible para la Agencia Tributaria controlar y fiscalizar los ingresos de estos youtubers en Andorra o, si por el contrario, una vez que cruzan la frontera quedan exentos de contribuir a Hacienda. Sin embargo surge una nueva cuestión, y es que aunque residan en Andorra no quiere decir que no tengan que pagar a la Hacienda española: si parte de sus ingresos provienen de actividades desarrolladas en España, los streamers tendrán que tributar por ellas en España, pero lo harán como no residentes, impuesto que tiene un tipo máximo del 24%, lejos también del máximo del 46% del IRPF.
Sobre si más YouTubers seguirán los pasos de los que ya se han mudado a Andorra, queda esperar y al final ver cuales son las causas de dicho traslado o si al final se quedan en España.
