sábado. 20.04.2024

Navidad-19

Yo soy demócrata y defensor de los Derechos Humanos. Eso para empezar a hablar. De ahí que tenga la obligación moral de dar voz a todos aquellos que no la tienen. Y hay un grupo que ha vivido silenciado durante años. Así que vamos a aprovechar este espacio digital para reivindicar a esa minoría. Déjenme respirar hondo y lo digo… Ahí va: hay gente a la que no nos gusta mucho la Navidad.

Ha tenido que venir una pandemia mundial para que encontráramos nuestro espacio. Nos llamarán insensibles. Pero no es cierto. Eso son acusaciones maliciosas. Lo que ocurre es que algunos tenemos una naturaleza un poco vampírica en lo que hace al contacto social. Eso es verdad y lo admito. Pero muy desencaminada no anda la máxima mallorquina que dice Estàs tot sol i encara sobra gent.

Por ejemplo, se oye por los mentideros que las reuniones familiares serán de un máximo de seis personas. Pues ya va bien; suficiente. Seis es un buen número. En todo caso podríamos aceptar un margen de error de un más-menos dos. Debemos ser comprensivos con las familias numerosas y con las malavenidas. Porque hay personas con muchos problemas para cuadrar el calendario familiar. Y de eso no se habla. 

En definitiva, Navidad sí, pero con moderación, concierto y decoro. Y, sobre todo, respeto a todas las orientaciones sociales. En cualquier caso, amigos, estas van a ser unas Navidad inclusivas; las primeras de la historia quizás. Así pues, a los que gusten de estas fechas, les deseo que pasen una feliz Navidad. Y los que no las disfruten, vampiros míos, les deseo que pasen esta feliz Navidad. Y esto opino. He dicho.

Navidad-19