jueves. 28.03.2024

Cuarentena turística. Otra improvisación más

Ha sido una más en el peor modo inimaginable de cómo gestionar la reactivación del sector turístico en las islas Baleares en una situación de crisis. 

Todos los que formamos parte del sector, sabemos que uno de los factores más importantes es el grado de confianza que representa y que transmite el destino turístico. También en una situación limite como la que estamos viviendo.

Desde el inicio, en Marzo, de la crisis sanitaria, en las diferentes ponencias y webinars a las que fui invitado, abogué, entre otras muchas acciones,  por una gestión diferenciadora para las islas, tanto Baleares como Canarias, en la salida y en la generación de factores de confianza que nos permitieran posicionarnos por nuestras características geográficas y de monocultivo económico, en el Top Ten mundial de destinos seguros, de destinos “Covid Free” como sello de calidad. Unos aeropuertos y puertos totalmente adaptados con la ultima tecnología y con los protocolos sanitarios necesarios. Un sector sanitario moderno, preparado (como ha demostrado) y coordinado con el sector productivo de las islas.

El último dislate que sufrimos, fue el anuncio del Gobierno, de la necesidad de cuarentena de quince días a todo aquel viajero internacional que llegara a España. Ni que decir que demuestran lo poco que conocen o les importa el turismo. Una noma inútil ya que la media de estancia del turista internacional cuando viaja a España es de siete a nueve días, y una norma innecesaria porque el propio estado de alarma impide la llegada de turistas internacionales. Unicamente ha servido para trasladar a nuestros mercados emisores un mensaje “antipromoción” y una negativa a las islas de que el gobierno de España no permitirá que gestionemos nuestro modelo económico y turístico, que siempre hemos demostrado que sabemos hacer.

Hace unos pocos días, el Gobierno ha rectificado por enésima vez y ha dicho que cuando se acabe el estado de alarma quedará desactivada esa cuarentena anunciada, y le pone fecha. El 1 de Julio. Mientras, están pactando una nueva prórroga del estado de alarma, haciendo continuamente concesiones que seguro, nos seguirán hipotecando más. Francia, Alemania y Gran Bretaña, han recibido nuestros mensajes equívocos e innecesarios, en lugar de llegar a acuerdos con España, en la definición de corredores sanitarios seguros. Mientras, destinos como Grecia, Portugal o incluso Túnez, nos toman la delantera.

Mientras seguimos sin conocer la existencia de  protocolos entre países, sin saber el grado de modernización de nuestros puertos y aeropuertos y sin saber realmente, cuantas de las mas de 1.500 operaciones diarias de otros años en aeropuertos de las islas, se producirán el 1 de Julio; las administraciones tanto central como autonómica siguen en estado de shock, y todo aquello que pretenden solucionar, lo retuercen y golpean un poco mas. 

Como siempre, vamos a salir de ésta gracias a nuestro sector empresarial y nuestros trabajadores. Si el 1 de Julio se convierte en la casilla de salida hacia la reactivación del sector turístico de las islas Baleares, ahí estará el sector productivo preparado para recuperar nuestro liderazgo. Y lo vamos a  hacer a pesar del Gobierno Central y los ERTES que a día de hoy todavía no sabemos cómo afectaran a la reactivación y si serán moldeables para la casuística de cada empresa. Y también a pesar del Gobierno autonómico, que de cara a la galería anuncia planes de reactivación consensuados con todos, y al mismo tiempo aprueba con premeditación, nocturnidad y alevosía, dos Decreto Ley de imposible debate, donde con la excusa de la crisis social más importante de toda nuestra historia reciente, crea cortinas de humo de falsa reactivación económica, y paraliza las competencias urbanísticas de los municipios de las islas, sine die. Una canallada, aprovechando el dolor y el desazón de la sociedad.

Cuarentena turística. Otra improvisación más